martes, 4 de junio de 2013

Sintiéndote

¿Y qué si es tu sonrisa con la que sueño?
No hay besos que más me gusten que los que espero cada día al caer la tarde, cuando ya está todo en calma y sólo pienso en esa boca, que me da los consejos que quiero oír, los que sé que me vas a dar, porque ya sé cómo vas a reaccionar...porque te conozco tanto, que me asusto.
La piel que guarda tantas huellas de ti en todo este tiempo se me eriza todavía al verte, soñando con que tu mano la temple y no veo más que un espejo de lo que quería ser de pequeña...al mirar en esos ojos que me traspasan como si mi pecho fuera plastilina.
No quiero dejar de sentir. ¿Qué más me da lo que esté escrito, si amarte así me hace estar viva?
Lo más bello que ha pasado por mi vida no entiende de razonamientos lógicos, sólo se detiene ante la fuerza de tus palabras, que no son sino el altavoz de tu alma.
Quiero tenerte más cerca aún, sentirte cada día, cruzarme con tus ojos al dormirme, porque sé que entonces, sólo entonces, no moriré al despertar.
Llevo un tiempo soñando con ello, y cada día me esfuerzo por levantar el día que pesa como una losa, pensando en que quizás vuelva a notar tu piel rozarme. Tengo la esperanza de oír tu voz real, la que hace que me tambalee, y no me miro en tus ojos, porque me falta valor, ya no puedo.
Cada día muero poco a poco, pensando en que quizás sólo viva soñando.
Pero mi sueño está más vivo que nunca sintiéndote como te siento.