jueves, 24 de agosto de 2017

Paradojas

No tienes los ojos más bonitos del mundo, pero no hay mundo más bonito que el que encuentro en tus ojos.
Ya no hago caso al olor de tus perfumes, porque solo me gusta el perfume de tu olor.
Me encanta cómo te queda la ropa que llevas, sobre todo cuando se queda en el suelo.
Y cuando mejor te entiendo, es cuando cierras la boca y hablan tus ojos y tus manos.
Tienes un cuerpo menudo y sin embargo, basta un intencionado roce de tu piel para hacerme sentir grande.
No me cuentes los deseos que pides, pero si se cumple al menos uno, has de saber que se habrá cumplido el mío.

jueves, 1 de junio de 2017

Tu triunfo

Vas a triunfar, lo vas a conseguir.
Y no sé si será esta vez o si será mañana; todo depende de cuán alto quieras llegar.
Pero esté donde esté tu meta, la lograrás.
Porque todos los que te conocen lo saben: si no puedes tú, no puede nadie.
Vas a triunfar. Y no será con medallas, ni reconocimientos, ni diplomas, ni siquiera vendrá acompañado de un aumento de sueldo.
Tu triunfo es personal. Tu reto, el reto gordo, el de verdad, te está esperando a la vuelta de la esquina y os reconoceréis nada más veros, porque los dos os estáis esperando desde hace tiempo.
Tu triunfo vendrá marcado por la superación, por la constancia de luchar por ser mejor, por madrugar cada día como si no doliera, por mostrar que eres un buen compañero, por saberte imprescindible entre tus superiores y no caer nunca en el ego, por sorprenderte con cada felicitación (de las muchas que recibes) como si fuera la primera que te cae, por no acostumbrarte a ellas, por repasar de vez en cuando tus cicatrices para no olvidarte de qué te hizo daño y de cuándo lo hiciste tú, por no acomodarte nunca, por no dejar de soñar.
Hoy tienes un pequeño reto y te brillan los ojos como nunca. Estás inquieto, no duermes lo deseable, la incertidumbre te invade cada hora y, sin embargo, no he visto ni un ápice de miedo en ti en estos días. Estás ansioso porque llegue el momento y no por quitártelo de encima, sino porque disfrutas con la adrenalina que supone enfrentarte a algo y demostrar que puedes con ello. La presión pasa por tu lado con repelente, te afecta lo mismo que el sol a la noche.
Te lo mereces. Te mereces conseguir este reto y todos los que surgirán después y al final, llegará tu triunfo. El de mirar atrás y sentirte pleno y orgulloso por quien eres hoy.

lunes, 13 de marzo de 2017

Cómo eres...

La imagen puede contener: una o varias personas, primer plano e interior
Tienes el abrazo cálido de la noche 
y la brisa que se busca en agosto
escondida entre los dientes.

Guardas en tu voz las ganas
que me ponen nerviosa por verte.

Todavía tiemblo en los segundos justo antes de verte.
Y me deshago si te encuentro por suerte.

La seda de tus manos rompe

cualquier tacto suave
Porque mi piel se eriza
al más mínimo roce tuyo.


Tienes la chispa en la mirada
que anuncia la hoguera
que se esconde detrás.



Eres el sol de octubre,

la contradicción constante
Y yo busco ser el equilibrio
De tu balanza imposible.


Tienes la llave maestra

Del cajón donde anidan
mis tormentos liberados


jueves, 22 de diciembre de 2016

Lista de deseos

Estas navidades deseo que nadie me eche de menos porque me sienta cerca y si te fallo, que me lo hagas saber.
Deseo estar en tu lista de deseos
Que la mayor de tus decepciones conmigo sea fijarte en que mi letra ya no se parece a aquella q recordabas.
Pido un saco de paciencia para saber perdonarme y otro de lágrimas para que el nudo de la garganta se deshaga mejor.
Que te des cuenta de que tu inicial con la mía son el principio de una carcajada y que, a partir de ahí, nada puede salir mal.
Y por último, pido que si hay que dejar de pensar no sea porque dejemos de ser críticos, sino porque el alma pida a gritos sentir y sepamos dejarle vía libre.
Feliz Navidad

domingo, 18 de diciembre de 2016

El bollito más dulce

La miro y aún no me lo creo...
Si no fuera porque el hecho de estar cada día más guapa no para de confirmarme que es verdad; que algo ha cambiado en ella, ahora q son dos.
Sé que está llena de dudas, que cada noche, cuando se tumba en la cama, busca a la Luna para preguntarle si será capaz, si lo hará bien y si será fácil y no obtiene por respuesta más que una patadita, porque ya empieza a moverse...
Amiga, estoy deseosa de verle la cara al bollito que estás horneando, pero sé que traerá tus ojos llenos de luz, tus morros mañaneros y llorará a "grito pelao" porque también tendrá tu voz fuerte, la de hacerse notar.
Pero sobre todo, estoy deseosa de verte compartir toda esa sensibilidad que te inunda, cómo le haces ver que con amor todo es más fácil y cómo te conviertes en leona protegiendo más que nunca lo tuyo.
Guapa, bonita, amiga...estoy emocionada porque vas a dar vida; algo que hacen mujeres y hembras desde hace miles de millones de años y sin embargo a mí sigue pareciéndome un milagro.

lunes, 10 de octubre de 2016

Aprendiendo de ti

Y yo, que siempre ando buscando la nueva idea, la respuesta a la duda infinita, el asombro por lo que descubro cada día, me topo contigo, el repartidor de lecciones...

Contigo he aprendido que la noche empieza y acaba cuando uno quiere y no cuando lo marca la Luna.

Que las pelis, buenas o malas, se ven por capítulos (no sólo las series).

Que las patatas fritas de bolsa son una guarnición que casa con casi todo.

Que la ropa interior se tiende en un lugar estratégico de la cuerda y que se puede ceder siempre, por muy cabezota que sea uno.

Me gusta que me enseñes a lavar las deportivas, a colarme de forma frustrada en una pista y, que con una sonrisa, se puede conquistar a quien sea y que todo sale mejor, hasta el peor de los días.

Quiero que me enseñes nuevas canciones, a elegir las mejores piezas de carne y a ponerme en el lugar del otro sin descuidar el mío.

Me gusta aprender de ti cómo no te cansas de aprender.

Me enseñas lo importante, las cosas más absurdas y las malas también. Y todas me gustan.

Me gusta aprender de ti hasta las cosas que ya sé.



lunes, 25 de julio de 2016

Cuando mis pies se vuelven sordos

Lo confieso: no puedo bailar contigo.
Déjalo, es inútil.
Y no te frustres; que ni eres mal profesor ni yo una desmotivada alumna. No hay remedio; igual que no habrá horas de ensayo que lo arreglen.
Entiende que mis pies se vuelven sordos cuando tus manos cogen las mías, cuando tus brazos me envuelven y mi boca está tan cerca de tu cuello.
Entiende que provocas tal torbellino en mí que no hay ritmo ni señal que yo interprete. Y q improviso mis pasos, por no salir de allí corriendo en ese instante. Porque no te resisto.
Enséñame si quieres cómo hago para que mi nariz deje de olerte, cómo insensibilizo mi piel cuando la rozas o cómo no bajar la mirada si tus ojos buscan los míos.
Déjame aprender eso, y probemos después lo de bailar.
Pero no ahora; en otra vida, ya si eso...